No hay nada peor que levantar el brazo y que la zona de las axilas se vea oscura y marchita. Hoy circulan varias formulas para subsanarlas. Pero, ¿son tan buenas como se dice? Entérate de todo aquí.
Durante el verano, las poleritas sin mangas son una adicción. Pero un fantasma acecha esta agradable sensación de ropa más liviana y fresca: las manchas que poco a poco comienzan a poblar la zona axilar. Se trata de un detalle que nos preocupa y que muchas veces nos deja literalmente de brazos cruzados.
Estas manchas son producto de la llamada melanosis post inflamatoria, que es una pigmentación secundaria a la inflamación crónica producida por la irritación de la depilación, los aromas y los componentes del desodorante. De hecho, este último factor es uno de los principales causantes, ya que sus ingredientes altamente irritantes -como el alcohol y otros- van agrediendo la zona día tras día.
'Los seres humanos no estamos preparados para depilarnos, afeitarnos o ponernos desodorante. Claro está que no podemos vivir sin ello, pero mientras más fuerte o perfumado sea el desodorante, hay más riesgo', explica el dermatólogo Rodolfo Klein, de la Clínica Klein y Klein.
'Además, muchas personas se ponen perfume –o colonia- en la ropa, justo en el pliegue de la blusa o camisa, donde suelen quedan restos de detergente, y con la mayor transpiración que se produce en las axilas, se disuelve más y puede irritar', puntualiza el especialista.
Cualquier cosa que produzca irritación, puede causar una pigmentación post inflamatoria. Es así como la depilación aporta lo suyo en esta agresión constante.
Por ello, el profesional aconseja que “cada persona debe descubrir cuál es el método que menos la irrita: depilación con cera, con rasuradora, con láser, etc., ya que la reacción a ella depende de cada uno”. Aunque, claramente, mientras más definitivo el método, menos frecuente se hace el daño.
Sin perjuicio de lo anterior, es importante destacar que hay otras causas. Pueden ser secundarias a enfermedades sistémicas, como por ejemplo, la diabetes o pre diabetes, también llamada resistencia a la insulina. Estas enfermedades hacen que se generen manchas en esta zona.
Asimismo, el factor hereditario aquí funciona haciendo que uno tenga mayor susceptibilidad de reaccionar de tal o cual manera.
¡No lo hagas!
En Internet rondan muchos consejos sobre ideas caseras para 'blanquear' de manera natural la zona. Se habla, por ejemplo, de que “el jugo de limón o el agua oxigenada” son buenos para ello. O derechamente, se entregan recetas como “exfoliar con una mezcla de azúcar con miel” o “mezclar bicarbonato de sodio, gotas de limón y agua oxigenada, para luego dejar actuar la preparación durante 20 minutos”. También, se recomienda aplicar “gotas de glicerina, jugo de limón y aceite de almendras”.
Sin embargo, el dermatólogo advierte que estas recetas no son tan eficaces como se asegura. 'El agua oxigenada y el limón pueden eventualmente servir para despigmentar, pero en la zona axilar son de alto potencial irritativo y, por defecto, es posible que causen más pigmentación”.
“Por otro lado, los aceites pueden obstruir la salida de sudor y provocar infecciones. Y el exfoliar puede causar heridas e infecciones en la zona. Los cambios de PH de la axila con bicarbonato sólo sirven en algunos casos, pues el variar la acidez también puede irritar e incluso causar infecciones de gérmenes u hongos oportunistas', asevera taxativamente el profesional.
Respecto de los desodorantes especiales que han salido al mercado y que pretenden desmanchar la zona axilar, el profesional cree que 'más que despigmentar, tal vez tienen menos riesgo de agredir, por la suavidad de sus componentes'.
Por tanto, los consejos para evitar seguir agrediendo la zona y bajar la intensidad de la mancha axilar son: primero, escoger desodorantes que no contengan alcohol ni sustancias agresivas. Un indicador importante es que sean hipoalergénicos. Luego, escoger una forma de depilarse que sea lo menos irritante posible, de acuerdo con la piel de cada cual.
Existen tratamientos dermatológicos para aclarar la axila. Pero para ello, antes de tratarse con cualquier producto, el consejo es acudir directamente a un dermatólogo y no apostar por remedios caseros que pueden tener consecuencias desagradables.